Eje: Turismo, territorio y patrimonio
Coordinadores:
Fabián Claudio Flores; CONICET – Universidad Nacional de Luján; licfcflores@gmail.com
Carlos R. Cáceres; CONICET- Universidad Nacional de San Martín; carlos.r.caceres@hotmail.com
José Ignacio Larreche; Universidad Nacional del Sur; joseilarreche@gmail.com
Resumen:
En los últimos años se ha dado un interesante viraje conceptual en torno a situar los análisis en el plano de la(s) experiencia(s) turística(s), es decir al conjunto de impresiones físicas, emocionales, sensoriales, espirituales y/o intelectuales, que son percibidas de diversas maneras por los viajeros. Este giro conceptual en la concepción turística permite analizar (e ir dejando de lado lecturas vetustas) la práctica a través de los cuerpos y las emocionalidades y los espacios. En efecto, la dimensión de la corporeidad y la emocionalidad, permite poner en foco a un personaje clave: el sujeto (turista/viajero). Precisamente, el turismo experiencial o vivencial rescata el rol de la fenomenología y lo subjetivo para recuperar, a través de narrativas, esas vivencias en primera persona. A su vez, el viaje, además de ser un desplazamiento a un lugar específico, es un “viaje al interior de uno mismo” donde se llevan a cabo las distintas actividades y acciones ancladas espacialmente.
Otro de los aspectos a considerar aquí, está asociado a la influencia de los imaginarios de los viajeros que operan en la construcción de los atractivos de los destinos, al abonar la diversificación de las modalidades heterodoxas. Así, los imaginarios turísticos heterodoxos atraviesan la definición de los atractivos a través de la intersubjetividad social y condensan experiencias, deseos, fantasías, información, prejuicios, emocionalidades, etc. De esta manera, los atractivos turísticos refieren a materialidades concretas con características específicas, pero también se ligan a idearios y narrativas que impregnan a estos paisajes tradicionales, sucesos, acontecimientos, propiedades extraordinarias y lo dotan de sentido turístico. Precisamente, considerar estas nuevas motivaciones -generadoras de nuevas experiencias- permite desplazar el enfoque hacia los bordes y hacer zoom en las heterodoxias que rompen con algunos de los lineamientos tradicionales que se venían desarrollando en los estudios del turismo y los ejes conceptuales que lo sustentaban. Es a partir de ello que comienzan a emerger algunas indagaciones que advierten zonas liminales entre el turismo y la memoria, el turismo y lo oscuro, el turismo y lo paranormal, el turismo y las sexualidades, el turismo y los cuerpos, el turismo y las emociones, el turismo y las espiritualidades, entre muchos otros. Esa condición de liminalidad es la que los posiciona como heterodoxias turísticas.
En torno a estas ideas centrales, la propuesta de mesa pretende discutir esos bordes difusos en los que la práctica turística, ligada a la experiencia de los viajeros, se viene desarrollando en los últimos años. Se busca recibir trabajos que analicen cómo estas heterodoxias rompen el esquema de perspectivas tradicionales al considerar atractivos y destinos turísticos -además de actores-, que se alejan de los convencionales, pero que forman parte del mismo. Los estudios turísticos, asimismo, se vienen enriqueciendo de las miradas interdisciplinarias, por lo que la mesa privilegiará aquellos trabajos que se sitúen en torno a estos esquemas críticos, complejos, diversos y multidimensionales.